Tú que sabes todo de mí:
Mi pasado, presente y futuro.
Aquel que cuidas de mi, que me escucha y cobijas en tus brazos.
A quien le doy las gracias por estar ahí alentándome a seguir luchando, que por mas que el resto no lo entienda solo yo y nadie más sabe que existes.
Eres tan real como lo soy yo, como todos los sentimientos que tengo en estos momentos.
Aquel ángel que no necesita de alas para llevarme a volar por aquel cielo infinito que día tras día lo veo en tus ojos.
Solo te basta hacerme soñar y hacerme saber que así estoy volando para escapar de todo esto.
Una realidad que a pesar que apesta tú y yo sabemos que vivimos dentro. Donde la magia y los sueños nuestros podemos no cumplirlos y sabemos que son sueños porque creemos en ellos
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